Promesa del pasado

entonces, Bryan, entonces prométeme que nunca, prométeme que mientras te acuerdes de mí, mientras que no me olvides no dejarás que nadie te pise.Así se despidió Sandra de su pequeño amigo. Esa fue la promesa que Bryan hizo a su mejor amiga. De ese modo quedaron enlazados dos almas más allá del tiempo y la distancia.Sandra abandonó su pueblo en uno de los momentos más felices de su joven vida. La perspectiva de los próximos años en la gran ciudad no compensaba la tristeza y desilusión por cuanto dejaba atrás. Con el paso del tiempo, sus orígenes se desvanecerían, sus amigos cambiarían y ella misma terminaría mirando a otro lado. Pero la nostalgia no soltaría su destino y llegaba el día de volverEn el pueblo dejó una vida de juegos y alegría. Una felicidad a la que podía renunciar. Pero volver, significaba encontrarse con su pequeño e inocente amigo y esa oportunidad no podía dejarla pasar. Su deseo de verle devolvía su presencia al pueblo. Aunque, posiblemente, la vida de Bryan, rodeada de decepción y violencia, le había llevado por otro camino