Este estúpido rastro de fe

En el barrio del Bósforo vive un maldito que mira las estrellas. No muy lejos, una mujer atiende angustiada una visita inoportuna, mientras una anciana de aspecto milenario se prepara para cocinar su plato estrella en compañía de su nieto. Todo parece bastante sencillo: tanto como un joven cantante de ópera abrumado por los grandes escenarios, una estudiante de doctorado que se enfrenta a la comida con su tribunal de tesis o un abuelo que habita una casa modesta, pero algo superpoblada. Y sin embargo, una fina línea del color de la sangre recorre, implacable, la historia de todos esos personajes y todos estos relatos.